Al iniciar este año 2020 las organizaciones sociales de todo el país reanudaron las movilizaciones encaminadas a exigir del gobierno nacional las demandas presentadas en el paro nacional del 21 de noviembre anterior. La larga lista de reivindicaciones presentadas, daban cuenta de la realidad de un país invisible para quienes ejercen el poder institucional. Agravada por una violencia en ascenso, recayendo en líderes, lideresas sociales y organizaciones comunitarias y sociales, y por la criminalización de la protesta social por parte del Estado. Al desprestigio y la incompetencia del Gobierno Nacional le llegó, como caído del cielo, la generalización de un virus que desde China se había expandido por Europa y luego a los demás continentes